El respeto y promoción de la autonomía creativa del alumno y la primacía de la metodología están en la base de los magros resultados educativos que nuestro país cosecha año a año en los informes PISA. Sin embargo, la formación del profesor y su capacidad para transmitir conocimientos, por supuesto en el marco de los mejores métodos, parece que han de regresar de nuevo a la palestra como elementos fundantes de una necesaria mejora de la educación  primaria y secundaria.
En efecto, la profesora sueca Enkvist, catedrática de español en Suecia, conocida ensayista sobre políticas educativas, reconoce que es menester redescubrir el papel del esfuerzo, la disciplina y la cultura general, en especial de la cultura lingüística. En este sentido, señala en una reciente entrevista publicada en Aceprensa, que un sistema educativo vale lo que valen sus profesores. Por eso, todo lo que sea fomentar y promover la mejor preparación de los profesores es fundamental. Que se mejore la calidad de las clases o que se faciliten lecturas para los profesores, por ejemplo, es capital para  la motivación del profesor y para que éste disponga de la necesaria auctoritas que le permita transmitir los conocimientos de la materia que imparte de la mejor forma posible.
Finlandia suele ocupar los primeros puestos del ranking del informe PISA a causa del sistema de selección del profesorado. Los profesores de primaria y secundaria son escogidos de entre los graduados con mejores expedientes académicos, de entre licenciados que tienen muy buena base y que acumulan, gracias a las lecturas, una muy buena cultura general. Se valora mucho para la selección la capacidad de expresión y suelen pasar varios años rodeados de alumnos inteligentes y motivados, lo que aporta, dice Enkvist, un gran dinamismo al proceso del aprendizaje. El plan de estudios que siguen los futuros profesores es de alto contenido y es impartido por los mejores profesores. Es decir, Finlandia, cuida, mima, la preparación de los profesores porque son conscientes de la importancia que tiene la educación para el desarrollo de un país.
En España, como sabemos, el ambiente de poca autoridad en el aula y las lagunas detectadas en la formación académica de los estudiantes de pedagogía explican también los malos resultados de la educación en nuestro país. En Finlandia, los alumnos que no van bien en las materias instrumentales reciben durante los dos primeros años un apoyo intensivo que en general resulta positivo. Aquí , sin embargo, el abandono escolar bate records y la desigualdad educativa es una lamentable realidad.
En Finlandia, el nivel de las clases es alto y por ello el nivel general de los alumnos aumenta, incluso el de los más desventajados. En el país nórdico no son necesarias tantas horas extraescolares como por estos pagos.
En fin, si se atendiera más al profesor, a la profesora, y se le ayudara realmente a mejorar la calidad de su trabajo, desde la motivación hasta la preparación de la clase seguramente otro gallo cantaría. Sin embargo, seguimos prendidos de dogmas y prejuicios muy difíciles de superar porque conforman el espacio de privilegios del que gozan ciertos sectores. Así de simple.
Jaime Rodríguez-Arana
@jrodriguezarana