Uno de los parámetros más observados en este tiempo de crisis económica es el del personal al servicio de las Administraciones públicas, sea de carrera, interino, contratado o eventual. Recurrentemente, cuándo se publica la encuesta de población activa, analistas y estudiosos de esta materia dirigen su mirada a la evolución cuantitativa de este personal. Un personal al que se ha congelado el sueldo estos años reduciéndose también las llamadas pagas extraordinarias.
Pues bien, a pesar de que se ha insistido en que el gasto de personal en el conjunto de las Administraciones públicas era muy elevado y que había que proceder a ajustes y adecuar los efectivos a la realidad, la última encuesta de población activa publicada estos días arroja unos datos realmente sorprendentes.
Es verdad que en 2012 buena parte del ajuste realizado en el gasto público en sentido amplio se aplicó reduciendo plantillas en las distintas Administraciones públicas. Sin embargo, si bien los Entes locales redujeron en 2012 nada menos que 85.000 personas, a partir de finales de ese mismo año se contabilizaron 17.000 efectivos más. En el llamado sector público, en los Entes públicos, el número de empleados en la actualidad es superior en 12.000 personas al de 2009.
La encuesta de población activa pone de manifiesto que dónde se ha concentrado la reducción personal ha sido en el personal interino de la Administración del Estado y de las Administraciones de las Comunidades Autónomas. En concreto, ahora tenemos 230.000 interinos menos, que suponen la mitad del descenso de personal de estos años.
Si observamos la masa salarial del personal al servicio de las Administraciones públicas llaman la atención dos hechos. Primero, en 2010 se redujo el salario un 5% y los tres años posteriores se congelaron las retribuciones eliminándose una paga extra en 2012, como bien recordarán todos los empleados públicos. Segundo, a pesar de lo anteriormente señalado, el informe de la dirección general de costes de personal del ministerio de hacienda y administraciones públicas acredita un ascenso del 7% en esta partida presupuestaria de la Administración del Estado. Es decir, ahora la remuneración de los empleados de la llamada Administración General del Estado asciende a 17.349 millones de euros, un 7% más, efectivamente, que 16.210 millones de 2007, justo al inicio de la crisis.
¿Alguna explicación?. Los datos revelan que desde 2007, desde el comienzo de la crisis, hay 14.057 empleados más trabajando en los ministerios, que es dónde se han concentrado los ajustes es en el personal interino y que, efectivamente, se han reducido las ofertas de empleo público y la tasa de reposición. ¿Entonces?. Pues que han aumentado los complementos salariales y las variables de determinados colectivos y que últimamente se ha relajado la tendencia a la reducción de personal. ¿Qué otra explicación puede haber?.
Jaime Rodríguez-Arana es catedrático de derecho administrativo. jra@udc.es
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